Con la tecnología de Blogger.
RSS

Buscando al Señor Goodbar (1977): Todos tenemos una doble vida


Uno de los más lúcidos retratos urbanos femeninos que ha dado el cine en toda su historia. Película muy amarga, dura y nada complaciente.

Theresa Dunn proviene de una familia fuertemente conservadora. En un determinado momento de su vida, comienza a sentir que ya no puede vivir en un hogar tan opresivo, bajo la censuradora mirada de un padre que desaprueba todo aquello que no responda a sus estrictas creencias e ideas. 

Siguiendo el ejemplo de su hermana (mucho más liberal), Theresa decide abandonar la casa de sus padres, pues allí no puede ser ella misma.

Ya convertida en maestra de chicos con problemas auditivos, comienza a vivir una doble vida: mientras que durante el día desempeña dicho cargo, por la noche recorre los bares y clubes nocturnos de la gran ciudad, en una odisea libertina de sexo ocasional y drogas.

Entonces, ¿cuál es la verdadera Theresa: la que por las mañanas enseña con toda paciencia y dedicación a niños sordos, preocupándose por su mejoría y bienestar, o la que durante la noche se entrega al placer y lleva una vida hedonista, superficial y desordenada?

Esplendida película donde una joven mujer camina por los caminos del exceso. En una época de transición donde la mujer lucha por ser algo más. 


Una época donde los hombres ya no jueguen con ellas sino todo lo contrario. Aunque a nadie le gusta que jueguen con él...

Mujeres capaces de llevar la doble vida, pues las personas con gran corazón son también fuego por dentro y a veces necesitan explotar, pues el placer de la carne es universal.

Naturalmente la sociedad puritana de los Estados Unidos estaba en plena decadencia cuando se hizo esta cinta. 

Los jóvenes amaban el rock and roll hedonista, el mestizaje racial estaba tomando una connotación positiva, pasaban olímpicamente del discurso moralista de los padres, y esperaban que su generación fuese mejor que la anterior. Ganas no les faltaban para experimentar.

Esta es una película muy de su tiempo, los 70, pero que aún arrastra muchos de los tics revolucionarios de finales de los 60, y esto es lo peor de la función, cierto aire trasnochado en la realización. Pero a mi juicio es un mal menor.

De ritmo y montaje frenéticos, quizás demasiado abrupta y embarulladamente y con diálogos rápidos y punzantes. 

La cocaína aparece esporádicamente en una película de personajes dislocados y vidas rotas y disolutas, perfecto reflejo de aquella época, con la música disco reinante como BSO constante.

Vista ahora, “Buscando al Sr. Goodbar” es el embrión de diversas películas realizadas después, de marcado contenido feminista. Los hombres son malos, malísimos. 

En esta película están representados todos los clichés negativos del feminismo de género sobre los hombres: mujeriegos, celosos, posesivos, patriarcales…confabulados para impedir el desarrollo del alma femenina de manera, como no, violenta.

Asombrosa Diane Keaton, en el papel más radical y libertino de su carrera; imposible hacerlo mejor. Destacar a un desconocido Richard Gere, en su primer papel importante, tan sobreactuado como fenomenal. 

Finalmente, ¿es reprochable que Theresa lleve una existencia de tales características? Porque mientras desempeñe bien su trabajo, nadie está en posición de criticarle nada. Sin embargo, no tardará en descubrir que su vida privada inevitablemente comenzará a intervenir en su vida pública.

Hacer lo que a uno le de la gana tiene limites, sobretodo en un mundo lleno de personajes que rozan la locura y donde los sentimientos no son más que papel mojado. Si quisiera, Theresa puede abandonar esa vida, poner orden a su existencia. Pero, ¿podrá salirse antes de que sea demasiado tarde?



  • Digg
  • Del.icio.us
  • StumbleUpon
  • Reddit
  • RSS

0 comentarios:

Publicar un comentario